Servidor físico o en la nube, ¿cuál es la mejor opción para mi negocio?
Un servidor es un elemento clave para muchas empresas, y a menudo el CIO o el personal responsable de la informática se pregunta si es mejor un servidor físico en las instalaciones de la propia empresa o si por el contrario, es mejor optar por un servidor cloud (en la nube). El servidor puede llegar a ser es un elemento estratégico e imprescindible para el correcto funcionamiento de las diferentes áreas de la empresa, tanto a nivel administrativo como en otras áreas como la producción o la logística.
Hoy en día, todos los departamentos suelen utilizar algún servicio que requiere de servicios centrales. El servidor juega un papel central al facilitar la gestión eficiente de información y recursos para los usuarios. En la mayoría de ocasiones, su función principal es almacenar y organizar datos, permitiendo el acceso y la compartición colaborativa entre los empleados.
Además, los servidores son fundamentales para alojar aplicaciones empresariales, facilitando la ejecución de procesos críticos y asegurando un rendimiento consistente. También gestionan la seguridad de la red, controlando el acceso a datos sensibles y protegiendo la información empresarial.
Al centralizar recursos, los servidores optimizan la administración de sistemas, facilitando copias de seguridad, actualizaciones y mantenimiento.
En resumen, los servidores son la columna vertebral de los diferentes sistemas de información que respalda las operaciones empresariales al proporcionar almacenamiento, procesamiento y seguridad esenciales para el flujo eficiente de información y aplicaciones.
En este artículo analizaremos cuál es el mejor servidor dependiendo de las necesidades de cada empresa.
¿Qué es un servidor en la nube?
Los servidores en la nube, o servidores cloud, ofrecen almacenamiento y procesamiento en equipos remotos. Su principal característica es que el acceso se realiza a través de Internet.
Ventajas de un servidor en la nube
Una de las ventajas más relevantes del servidor cloud es que no necesita espacio físico en la empresa. Con esto se evita invertir en hardware, actualizaciones, copias de seguridad y mantenimiento.
Otras ventajas del servidor en la nube son:
- Mayor seguridad. El servidor en la nube está más protegido frente a averías o ciberataques. Además, sus planes de contingencia son más rápidos y eficaces.
- Actualización constante. Las actualizaciones del servidor cloud son automáticas en la mayoría de las ocasiones, por lo que siempre dispones de la tecnología más avanzada con las últimas mejoras de seguridad.
- Escalabilidad y flexibilidad. Puesto que se basa en pago por uso, el servidor en la nube se puede contratar con la capacidad que necesita tu empresa en ese momento. Podrás aumentar la capacidad a medida que la empresa crezca o, incluso, pasar a un plan inferior.
- Movilidad y conectividad. El servidor cloud es perfecto para el trabajo híbrido o en movilidad. Los usuarios pueden acceder a la información desde cualquier lugar y dispositivo. Solo se necesita conexión a Internet.
- Sostenibilidad y ahorro. Es más eficiente contratar un servidor en la nube que mantener las condiciones ambientales y el consumo eléctrico de una instalación local.
Finalmente, con el servidor en la nube no necesitas personal para el mantenimiento de la infraestructura.
¿Qué es un servidor físico?
Los servidores físicos se encuentran en las instalaciones de la propia empresa y se encargan de alojar, procesar y distribuir la información a través de una red local o WAN.
Ventajas de un servidor físico
La principal ventaja de disponer de un servidor físico en la empresa es que su funcionamiento no depende de Internet. Si se pierde la conexión, se puede acceder igualmente a los recursos del servidor siempre y cuando los equipos tengan acceso a él a través de la red interna.
- Mayor control: Un servidor físico ofrece a las empresas un control directo sobre el hardware, lo que puede llegar a ser esencial para aplicaciones que requieren recursos específicos o configuraciones personalizadas.
- Rendimiento dedicado: Al tener recursos exclusivos, los servidores físicos pueden ofrecer un rendimiento más predecible y consistente, ideal para aplicaciones sensibles al rendimiento. Y además, permite distribuir los recursos en función de las necesidades empresariales.
- Seguridad física: Los servidores físicos permiten un mayor control sobre la seguridad física, ya que se encuentran en las instalaciones de la empresa, lo que puede ser crucial para proteger datos sensibles. A la vez, implica establecer mayor control y protocolos de actuación frente a amenazas internas y externas.
- Menores costos a largo plazo: Aunque los costos iniciales pueden ser más altos, a largo plazo, la propiedad de un servidor físico puede ser más rentable que los costos recurrentes asociados con servicios en la nube, puesto que suele ser un pago o cuota mensual o anual.
- Personalización: La capacidad de personalizar la configuración del hardware según las necesidades específicas de la empresa es una ventaja clave de los servidores físicos.
- Cumplimiento normativo: En algunos casos, existen empresas que se regien por una normativa muy estricta en términos de seguridad, por lo que puede ser más fácil cumplir con estas regulaciones.
- Menor latencia o tiempo de respuesta: En entornos donde la latencia es crítica, como en aplicaciones en tiempo real, los servidores físicos pueden proporcionar tiempos de respuesta más rápidos al no depender de la infraestructura de red externa o el ancho de banda de internet.
¿Cuál es la mejor opción para mi negocio?
La elección entre un servidor en la nube o un servidor físico depende de las necesidades específicas de cada negocio. En líneas generales, si tu empresa requiere un control total sobre sus datos y software, un servidor físico puede ser la elección adecuada, siempre y cuando puedas invertir en un buen hardware. Por el contrario, si tu empresa está en crecimiento, probablemente prefieras flexibilidad, escalabilidad y costes iniciales bajos. En ese caso, un servidor en la nube puede ser la mejor alternativa. Ambas opciones tienen ventajas e inconvenientes, que se deben evaluar cuidadosamente antes de tomar una decisión. Si necesitas asesoramiento, contacta con nosotros. Te ayudaremos a elegir el servidor más adecuado para tu empresa en función de las necesidades.