¿Cuál es la mejor opción, comprar o alquilar una impresora para tu oficina?

Esta es la pregunta que se hacen muchos empresarios y/o responsables de compras e IT cuando se plantean la necesidad de equipar su oficina con una o varias impresoras multifunción profesionales.

Los equipos de alto rendimiento para trabajar con papel de grandes dimensiones, imprimir carteles o producir catálogos y folletos tienen unos costes importantes que hay que tener en cuenta. Antes de realizar una inversión de este tipo conviene valorar las dos opciones que tenemos a nuestro alcance: comprar o alquilar una impresora.

Para ayudarte a elegir la alternativa más conveniente para tu empresa, vamos a analizar las ventajas y desventajas de cada una de estas modalidades.

Comprar una impresora: ventajas y desventajas

Una de las principales ventajas de comprar una impresora para tu oficina es que realizas una única inversión inicial. No obstante, esto es al mismo tiempo su principal inconveniente: el desembolso es elevado.

La compra no implica ningún contrato ni pago mensual. El comprador es el encargado de gestionar el mantenimiento. De manera opcional es posible contratar un plan de mantenimiento con la empresa donde adquiriste la impresora o, simplemente, llamar a un técnico cuando tengas alguna incidencia con el equipo en cuestión.

En el caso de no contar con un plan de mantenimiento, debe haber una persona encargada de supervisar el funcionamiento, así como de controlar el stock de consumibles y papel. Ese mismo empleado debe estar pendiente de posibles averías para contactar con el servicio técnico. Todos estos costes corren de la parte del comprador.

Pasado un tiempo, la impresora puede quedar obsoleta porque las necesidades productivas hayan aumentado o, simplemente, porque el equipo haya llegado al final de su vida útil. El equipo multifunción o la impresora habrán perdido su valor y será necesario realizar una nueva inversión para adquirir un nuevo equipo. No es habitual que las empresas puedan permitirse desembolsos periódicos de esta naturaleza para costearse un equipo de impresión que esté a la altura de las necesidades.

Esto hace que muchas veces se vayan parcheando los problemas o se adquiera una impresora con funcionalidades inferiores a lo que realmente se necesita. Esto se traduce en falta de productividad y rendimiento.

Renting o alquiler de una impresora: ventajas y desventajas

El renting de impresoras está pensado para que cualquier empresa pueda disponer de equipos multifunción de última generación sin realizar importantes inversiones.

Este sistema consiste en pagar una cantidad mensual solo por lo que imprimes. Este coste incluye los consumibles y el mantenimiento del equipo para que esté siempre en perfecto estado y al máximo rendimiento.

De esta forma, puedes alquilar una impresora realmente potente y que cubra todas las necesidades de tu oficina para ofrecer el mejor servicio tanto a tus clientes externos como internos.

No solo dejarás de estar pendiente de comprar los consumibles, sino que te olvidarás de costes imprevistos. Si el equipo multifunción necesita alguna reparación, el soporte técnico de tu proveedor se ocupa de todo.

Una vez terminado el periodo de renting de la impresora, puedes sustituirla por el modelo que prefieras. No existe ningún tipo de atadura.

Como ves, cada sistema tiene sus ventajas e inconvenientes. No obstante, el renting de impresoras es un modelo en auge porque sus beneficios son superiores a sus desventajas.

En Canon Vallès, ponemos a tu disposición los equipos impresión más avanzados tanto en la modalidad de compra como en la de alquiler. Si necesitas asesoramiento, no dudes en contactar con nosotros. Nuestros expertos analizarán las necesidades de tu negocio y te ofrecerán la solución que mejor que se adapte a ellas.